De acuerdo al barbijo utilizado, explica la profesional, se absorberá en mayor o menor medida el sonido producido al hablar. Por ejemplo, los que son de tipo N° 95, absorben mucho más el sonido que uno de tela o quirúrgico.
“Se puede hablar con más facilidad porque el oyente va a percibir mejor nuestra voz al no haber tanta absorción. Sin embargo, es importante mantener siempre la distancia de metro y medio al menos, y si tengo que hablar con alguien en un ambiente ruidoso intentar que el discurso sea lo más corto posible, hacer un ahorro vocal”, sostuvo la licenciada.
Además, contó que ella aconseja a sus pacientes para cuidar su voz que hablen de manera más pausada para que puedan coordinar la respiración y el uso del aparato fonador.
“Es esencial articular, abrir la boca para hablar, porque con el barbijo las personas tienden a mover menos los labios. Al articular bien hay una mejor proyección de la voz. El hablar con tranquilidad y despacio es importante cuando la persona está en un ambiente tranquilo y sin ruido. Pero si el lugar es muy ruidoso, en la calle por ejemplo, con barbijo y todo deberíamos hacer un poco de ahorro bucal”, sugiere.
Por último, recuerda que hay que respetar los descansos de la voz, hidratarse y tratar de que en las oficinas de trabajo o estudio no haya ruido en exceso. Tratar de disminuir ese ruido ambiental para que la voz se escuche mejor.