• Hospital Avellaneda
  • La artritis juvenil tiene una amplia gama de tratamientos en la salud publica

    Esto variará de acuerdo a la complejidad de cada cuadro, a los síntomas y el compromiso del paciente.

    Si bien la artritis idiopática suele asociarse a personas de mayor edad, también se manifiesta en los niños hasta los 16 años y se presenta como una inflamación de las articulaciones cuya causa no se conoce. “Dentro de la artritis idiopática juvenil se encuentra un conjunto de enfermedades que engloba 7 tipos de artritis”, afirmó la reumatóloga infantil del hospital Avellaneda, Ana Sofía Narchi.

    Dentro de esta clasificación de 7 tipos hay artritis sistémicas en las cuales los síntomas no solo se localizan en las articulaciones, sino que se presentan con fiebres, erupciones en la piel, compromiso en el hígado y otros órganos internos. Las más comunes afectan las articulaciones  y se distinguen entre las que afectan menos de 4 articulaciones -oligoarticulares- y las que dañan a más de 4, que se denominan poliarticulares.

    Los síntomas más comunes son el dolor localizado a nivel de alguna articulación: “Por ejemplo el dolor a nivel de alguna de las rodillas puede ocasionar en el niño una renguera, el dolor a nivel de articulaciones de miembro superior puede causar dolor al momento de escribir en la escuela, al peinarse o al querer realizar cualquier otro tipo de actividad. Otro síntoma característico es la inflamación, se percibe que una articulación en comparación con otra está más grande o hinchada”.

    La rigidez matinal es otra característica en la cual la dureza de las articulaciones se presenta con mayor frecuencia en la mañana y recién cuando el cuerpo va entrando en calor pueden empezar a realizar sus actividades cotidianas. “El diagnóstico es fundamentalmente clínico, se realiza un interrogatorio, se revisa al paciente y casi el 100 por ciento se obtiene del análisis físico, si bien podemos ayudarnos de estudios de laboratorio y de imágenes para descartar otras enfermedades que pueden ser similares y para categorizar a los pacientes de mayor riesgo o compromiso”, dijo.

    En cuanto a los tratamientos, la profesional detalló que existe una amplia gama de acuerdo a la complejidad de cada cuadro, a los síntomas y el compromiso del paciente: “Dentro de los más bajos tenemos los analgésicos, el ibuprofeno y el naproxeno, después tenemos los corticoides para momentos puntuales y especiales, antinflamatorios más potentes, metotrexato que es un inmunosupresor y tratamientos biológicos en lo más alto de la complejidad”, concluyó.

    BREVES