Este domingo por la noche, el Sistema de Emergencias 911 recibió un llamado donde solicitaban urgente la presencia policial, ya que un hombre estaba pateando la puerta de un domicilio con intenciones de derribarla, situación que se registraría bajo una violencia de género.
De esta forma, personal de la División Patrulla Motorizada que se encontraba recorriendo la ciudad, se presentó de inmediato en el inmueble . Al llegar al lugar, se encontraba un individuo afuera del domicilio, muy alterado, y una mujer que salía del interior del mismo. Fue entonces que la damnificada detalló que su expareja llegó en estado de ebriedad a su casa manifestando querer ver a su hijo. Ella accedió a dárselo, pero sin soltarlo de sus brazos, ya que temía que lo volteara por el estado en el que se encontraba el hombre.
Esta situación enfureció al agresor que intentó arrebatarle la criatura para llevárselo. La mujer logró sacarlo de la casa y poner llave a la puerta de acceso, lo que le permitió llamar al 911.
Además, contó que llevan varios meses separados, ya que esta persona sufre de problemas psiquiátricos y teme por su vida y la del niño.
Ante esta denuncia, la Unidad Fiscal de Integridad Sexual y de Género dispuso que se asigne una consigna policial en el domicilio de la víctima (ya que el agresor vive a dos casas de la suya) y recorridos preventivos por la zona.