El presidente, Alberto Fernández, dejó inaugurada la Planta de Chacinados y Salazones La Cocha. Fábrica que implicará la generación de valor agregado para los productores porcinos del interior tucumano y de la región.
El Mandatario nacional arribó a la ciudad desde el Aeropuerto Benjamín Matienzo, a bordo del helicóptero presidencial. Lo hizo acompañado por el jefe de Gabinete de Ministro de la Nación, Juan Manzur; el ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández; el ministro de Trabajo de la Nación, Claudio Moroni; Julio Vitobello, secretario General de la Presidencia; y el gobernador, Osvaldo Jaldo.
Allí los esperaban el vicepresidente primero de la Legislatura, Regino Amado; el diputado nacional, Pablo Yedlin; el intendente de la ciudad, Leopoldo Rodríguez (H); los legisladores Sandra Mendoza y Leopoldo Rodríguez (P); el edil capitalino, Ernesto Nagle; y el secretario de Coordinación y Control de Desarrollo Productivo, Mariano Garmendia.
La visita se convirtió en un hecho histórico para la localidad porque es la primera vez que un Presidente de la Nación recorre la ciudad. Al llegar al lugar, se presentó una maqueta del establecimiento productivo, autoridades locales leyeron un decreto por el cual Fernández fue declarado Ciudadano Ilustre, se descubrió una placa inaugural y se realizó un recorrido por la fábrica.
La flamante Planta, por acuerdo con el Gobierno provincial, reviste el estatus de Ente Autárquico. Es una iniciativa que se pudo concretar con aportes municipales, provinciales y nacionales. Completadas todas las obras, sumará unos $120 millones de inversión y posibilitará generar una nueva actividad industrial en un lugar caracterizado por la producción tabacalera. Hasta el momento, son 34 los productores que trabajan con un centro de inseminación gestionado por el municipio.
El Presidente dijo: “Es un día espléndido para inaugurar un lugar de trabajo que hizo el municipio. Felicito al Intendente. Me contaba el jefe de Gabinete, mi amigo Juan –Manzur-, que aquí hay muchos productores de cerdo y que hacía falta agregar valor a la producción porcina de los vecinos de La Cocha. Esto es lo que la Argentina necesita. Es lo que va a concentrar todo nuestro esfuerzo para que en el país crezca la producción”.
Fernández, comentó, además, que en el marco de la salida de la pandemia, se observa un renacimiento de la actividad turística y dijo que este fin de semana en Argentina se movilizaron más de cuatro millones de personas: “Tucumán tiene colmada su plaza hotelera. Estamos orgullosos".
También valoró que emprendimientos como la Planta de Chacinados son modelos para desarrollar, no sólo en el centro del país, sino a lo largo de todo el territorio: “en cada rincón de la Argentina, para federalizar el país. Lo primero que hace falta es que los hombres y mujeres puedan nacer, crecer, estudiar y desarrollar su vida en el lugar donde nacieron. Por eso hicimos el esfuerzo de abrir fuentes de trabajo como estas”.
El Mandatario nacional expresó que conoce las carencias del norte argentino y recordó ser hijo de un riojano, al tanto que convocó a la unidad del trabajo para “decirle sí al trabajo y la producción”.
El Intendente valoró: “Esta planta habla de trabajo, crecimiento, progreso y dignidad para la provincia. Es un día histórico que va a quedar en la memoria de todos”.
Rodríguez manifestó: "es la primera vez que un Presidente y un Jefe Gabinete visitan la ciudad. Es un día histórico porque ponemos en funcionamiento la primera industria de La Cocha".
El jefe municipal destacó además: "Las familias de la ciudad lo vivieron como una fiesta porque pudieron saludar al Presidente. Estamos agradecidos con el Jefe de Gabinete y con el gobernador Jaldo que nos ayudaron para poder concretar este anhelo que teníamos".
Rodríguez recordó que en el lugar, hace cuatro años, había un matadero municipal en desuso. "Con este proyecto logramos concretar un sueño para la ciudad que dará valor agregado a la producción porcina", concluyó el intendente.
La Planta en números
Al respecto, el subsecretario de Producción y Empleo del municipio, Daniel Bayltalá, dijo: “Es un ícono para La Cocha. Un proceso que abarca cinco puntos de un plan estratégico local: un centro de inseminación, sala de gestación y maternidad para 60 madres, sala de engorde, planta de chacinados y un proyecto que todavía está bajo análisis. La demanda inicial será de 200 capones por mes y luego requerirá una producción anual de 150 madres”.
También dijo que “esto, no solamente favorecerá el trabajo en planta, sino también la comercialización, logística y la producción pecuaria primaria”.
Dijo que actualmente son asistidos 34 productores a los que se suman otros 26 para la etapa de gestación y maternidad conjunta: “esta planta tendrá la prioridad de compra a ellos. La planta tiene capacidad laboral para 15 personas, a las que se incorporarán otros empleados de forma paulatina”.
También evaluó la visita de funcionarios nacionales: “La apertura nos pone en un plano a nivel nacional para el conocimiento de la planta y a la vez representa una exigencia. Esta fábrica es un ícono para La Cocha que pasará a ser una ciudad que tenga oferta cárnica de chacinados y salazones”.
• La cuenta con una superficie de 750 m2 de área de producción.
• Incluye cámara de recepción para 150 medias reses.
• Cámara de enfriado de cortes de seis por tres metros.
• Un horno de secadero de salame con capacidad para 1800 kilogramos.
• Cámara para salazones con capacidad de 1800 kilogramos para bondiolas y salames.
• Olla de cocción de 1.1 m3 y cámara de enfriado para productos cocidos.
• El ritmo de trabajo para salame es de siete días cada 1800 kilogramos.