"El sábado se dio inicio al segundo año de la Liga Nacional con una alegría inmensa ya que Tucumán no sólo presentó un equipo, sino dos. Los jugadores que se fueron capacitando, mejorando, tanto en el manejo físico, psicológico, ocupacional, y que no se circunscribe sólo a la restitución de ese miembro amputado. Todo deportista sufre pequeñas lesiones producto de la actividad, después de la práctica deportiva aparece el cansancio, el dolor muscular, los pequeños desgarros, una distensión; pero se trabaja en ello”, resaltó el profesional.
Asimismo, opinó que el principal beneficio de hacer este tipo de deporte son las consecuencias psicológicas: “Esa persona rápidamente pasa por las distintas fases que tiene un amputado, shock o trauma, negación, ira, depresión, y sigue rápidamente a la aceptación, busca descubrir en que condición está y vence los efectos de la inmovilización prolongada”, contó.
Para lograr esto, el equipo multidisciplinario tiene la tarea de evaluar al paciente en diversos aspectos, como el área cardiológica o respiratoria. “A corto plazo, hacemos un plan de complementación muscular tanto en el tren inferior como superior; a mediano plazo, una evaluación funcional de cada jugador para mejorar la coordinación y el equilibrio, con y sin pelota; y a largo plazo, hemos diseñado un programa para ganar fuerza muscular, para la adaptación física de cada jugador, para que tenga las posibilidades y capacidades y así logre jugar en la Selección Argentina, participar incluso de campeonatos sudamericanos o mundiales”, cerró.