“Hoy en día es importante tener uno en casa. Es una necesidad para cualquier familia, más cuando tenemos hijos menores a cargo”, comienza diciendo la referente.
Y continúa: “Debe estar guardado en un lugar de fácil acceso para los adultos y difícil para los niños, como puede ser en los estantes del baño, arriba del lavamanos. Se recomienda que se pueda transportar de un lugar a otro. Se sugiere tener siempre una linterna a mano por si nos llegasen a cortar la luz, de esta manera podremos alumbrar para llegar al botiquín”.
Se lo puede adquirir en las farmacias o bien fabricarlo en casa con una caja de zapatos. Hay que dividirlo con compartimientos para ordenar allí los productos y remedios.
Además, Rapetti advierte que el botiquín debe ser controlado periódicamente, hay que chequear que todo esté en buen estado.
“Generalmente está destinado a aliviar las molestias que no requieren consulta médica. Debe incluir una lista de los números de servicios de emergencia”, comenta y luego enlista cómo debería estar compuesto:
- Jabón neutro que se puede utilizar para higienizar las heridas
- Alcohol en gel para desinfectar las manos
- Un termómetro para medir la temperatura
- Guantes descartables para seguridad de quienes asisten al accidentado
- Gasas estériles, vendas, algodón y antisépticos
- Tijeras para cortar las gasas o la ropa del accidentado; una tela adhesiva para fijar las gasas
- Una bolsa para aplicar frio en la herida según el requerimiento
- Cremas para quemaduras solares
- Paracetamol e ibuprofeno (ambos de venta libre)
- En caso de que un integrante de la familia tome un medicamento recetado por el médico, debe tener allí el remedio con las indicaciones correspondientes