Jueves, 23 de octubre, 2025
  • SALUD
  • El laboratorio de Zoonosis intensifica el control de enfermedades animales

    23 Oct 2025 10:56

    Este dispositivo funciona dentro de los lineamientos del Ministerio de Salud Pública a cargo del doctor Luis Medina Ruiz, en el procesamiento de las muestras en búsqueda de casos de Rabia, Brucelosis, Leishmaniasis y Leptospirosis.

    En este marco, el bioquímico Federico Agustín Viaña Herrera, especialista del Laboratorio División Zoonosis explicó: “El dispositivo se encarga principalmente de analizar muestras para detección de Rabia, Brucelosis, Leishmaniasis, Leptospirosis, que son las cuatro en las que trabajamos, y las más asociadas a enfermedades zoonóticas de esta zona”.

    Mientras tanto, el profesional indicó: “La Brucelosis es una infección bacteriana relacionada normalmente con productos lácteos que pueden estar contaminados con la bacteria, ya que está normalmente en un reservorio del ganado, ya sea ganado vacuno u ovino. En la Provincia, además de este tipo, se han detectado muchos casos asociados a reservorios de perros. La Leptospirosis, también es una infección bacteriana, en la que detectamos en San Miguel de Tucumán, también está asociada a reservorios de animales domésticos”.

    “Con respecto a la Rabia, buscamos los casos sospechosos a través de animales que tienen síntomas o signos neurológicos y terminan falleciendo, nos hacen llegar el cuerpo y lo procesamos en el laboratorio buscando partículas virales a través de inmunofluorescencia. En cuanto a los demás estudios, hacemos detección de anticuerpos generados por animales. Las veterinarias nos envían la muestra de sangre o se acercan directamente al Laboratorio”, relató.

    En la provincia, comentó Viaña Herrera, los casos de Rabia son escasos. El último caso positivo fue, en el 2020 en Buenos Aires. Casos en humanos no hay, podría decirse. Lo que sí existe, es detección del virus en reservorios comunes, que en las zonas urbanas es el murciélago. En las zonas rurales, es muy común, en el reservorio el murciélago chupa sangre, el hematófago, la cual contagia al ganado vacuno principalmente. En este esquema, estamos en contacto constantemente con los veterinarios que se comunican a través de diferentes medios y nos hacen llegar ya sea, el cerebro ya procesado por ellos, la cabeza, o el animal si son pequeños y nosotros lo procesamos aquí.

    En tanto, manifestó: “En el caso de que llegamos a tener un caso positivo, tenemos un grupo de vacunadores que junto con los veterinarios van a la zona a realizar el bloqueo y la vacunación de todos los animales posiblemente afectados de la zona. También tenemos contacto con médicos especializados en Rabia a los cuales derivamos los pacientes o personas que pueden haber tenido contacto con el animal para que sean tratados”.

    Finalmente precisó: “El caso de Rabia es muy importante, debido a que la enfermedad es mortal. Parte de la prevención es la vacuna antirrábica. Para una persona que sospeche haber estado expuesto al virus de la Rabia, hay una vacuna post exposición. En el caso de que haya sido muy expuesta, tenido lesiones de gravedad, mordeduras de un animal infectado o confirmado, se da también tratamiento con la antigammaglobulina, que son anticuerpos contra la Rabia”.