“Por tercer año consecutivo, y en un acto inédito, se realizó la certificación de especialidades en licenciados en enfermería en distintas áreas como dirección y gestión, hemato-oncología, salud mental en emergencias y otras actividades críticas. Esto forma parte de una importante iniciativa de los profesionales de continuar formándose y capacitarse de manera permanente”, destacó el responsable de la cartera Sanitaria, Luis Medina Ruiz.

En ese sentido, remarcó que la formación continua es clave para garantizar una atención de calidad a los pacientes del sistema de salud provincial. “Este camino de capacitación constante permite brindar una mejor respuesta sanitaria en Tucumán”, sostuvo.

La iniciativa se lleva adelante a través del Consejo de Certificación y Recertificación en Licenciaturas de Enfermería C.C.R.E.L.E, en articulación con el decano de la Facultad de Medicina, doctor Mateo Martínez, y el Ministerio de Salud. “Buscamos formalizar capacidades que ya existían. Había licenciados con excelente formación y experiencia, pero sin reconocimiento formal”, explicó el ministro.

Asimismo, subrayó el rol central que ocupa la enfermería dentro del equipo de salud. “Estamos convencidos de que el enfermero es un protagonista fundamental y su importancia crece cada vez más en nuestra provincia”, afirmó.

Finalmente, explicó que el proceso de certificación es exigente y requiere no solo el título de grado, sino también residencias, experiencia en servicios críticos como terapia intensiva y la acreditación de formación específica. “Se necesitan al menos 700 puntos para poder rendir y obtener este certificado, que tiene una validez de cinco años y luego debe ser recertificado”, concluyó.

El decano de la Facultad de Medicina, Mateo Martínez, participó del acto de entrega de certificados de especialización a una cantidad significativa de licenciados en enfermería, realizado en forma conjunta con el Ministerio de Salud de la provincia.

En ese marco, Martínez remarcó la importancia de la articulación entre la Facultad de Medicina y el Sistema Provincial de Salud, y señaló que este trabajo conjunto, como en otros numerosos emprendimientos, representa una garantía de calidad en la atención para la comunidad.

“Otorgar un certificado de especialista a profesionales que ya cuentan con el título de licenciado en enfermería y que continúan actualizando de manera permanente sus conocimientos, habilidades y destrezas, es una bendición para la gente”, expresó el decano.

Asimismo, destacó que este proceso no solo fortalece y jerarquiza la profesión de enfermería, sino que además brinda tranquilidad a la ciudadanía. “Cada día las personas pueden estar seguras de que reciben atención de enfermeros mejor formados y con mayores competencias”, expresó.

Liliana Valdés, presidenta del Consejo de Certificación y Recertificación para Licenciados en Enfermería, resaltó la relevancia de la tercera cohorte de entrega de Certificados de Especialidad, realizada en el marco de un trabajo articulado entre el Ministerio de Salud y la Facultad de Medicina.

“Hoy culminamos la tercera entrega de certificados de especialidad, un hecho de gran significancia para toda la población, porque garantiza que nuestros enfermeros se capaciten, se actualicen de manera permanente y brinden cuidados de calidad. Estos procesos brindan tranquilidad a las familias, al saber que sus pacientes están en manos de profesionales con el máximo nivel de conocimiento”, destacó.

Durante la jornada se entregaron 49 certificados, alcanzando un total de 325 enfermeros especialistas en toda la provincia. Actualmente, el sistema cuenta con 19 especialidades en enfermería, de las cuales en esta oportunidad se certificaron 12. La mayoría de los profesionales certificados se desempeña en el Hospital de Niños, especialmente en el área de pediatría, un sector que requiere actualización constante.

Asimismo, Valdés celebró la certificación de dos especialistas en salud mental y psiquiatría, un área de creciente demanda e impacto en la población. “Es fundamental contar con enfermeros capacitados para responder a esta problemática y abrir el camino para que muchos más continúen su formación”, sostuvo.

En relación con el proceso de certificación, explicó que los postulantes atravesaron una evaluación rigurosa, que incluyó la presentación de su currículum con la capacitación adquirida durante los últimos tres años y la evaluación por parte de un tribunal especialista. Los profesionales rindieron un examen de 100 preguntas, debiendo alcanzar al menos el 70 por ciento de respuestas correctas para obtener la certificación.

Finalmente, remarcó el impacto positivo de estas especializaciones en la salud pública, ya que los profesionales certificados se desempeñan en los subsectores públicos y privados y en los tres niveles de atención. “Este convenio entre el Ministerio de Salud y la Facultad de Medicina nos brinda respaldo institucional y garantiza a la comunidad un cuidado especializado y de calidad”, cerró.