Tras la frustrada operación realizada el 15 de septiembre pasado, un equipo de investigadores de la División Delitos Telemáticos y Económicos logró establecer rápidamente el nombre del titular de la cuenta bancaria, de la línea telefónica desde donde se hacían las operaciones y el domicilio del imputado. Por ello se solicitaron las medidas judiciales que este jueves dieron como resultado el secuestro de una computadora, una netbook y un teléfono celular. El allanamiento se concretó este jueves en una vivienda de Las Talitas por orden del juez Raúl Ortega.
De acuerdo al relato de la víctima, ella vio una publicación en la red social de Facebook en la que un corralón de Villa Mariano Moreno ofrecía materiales para la construcción a precios rebajados. Al contactarse con el teléfono celular que aparecía en la publicación, hizo una transferencia bancaria de $80.000. Su sorpresa fue cuando al día siguiente, al presentarse en el corralón, sus propietarios desconocieron la compra y constataron que autores desconocidos habían usado el nombre comercial de su corralón para generar confianza y cometer el delito.
El exitoso trabajo investigativo fue supervisado por el director General de Investigaciones, Comisario Mayor Jorge Dib.
