En el inicio de la Semana de la Prematurez, el Ministerio de Salud de Tucumán destacó la importancia del control prenatal y el trabajo interdisciplinario de todas las maternidades provinciales, que combinan tecnología de vanguardia y vocación de servicio para garantizar más oportunidades de vida a los recién nacidos prematuros.
La iniciativa, tiene como fin reflexionar sobre la relevancia de los controles prenatales, destacando la capacidad de todas las Maternidades de la provincia para brindar respuestas tanto en recurso humano como en tecnología.
En este contexto, el ministro de Salud Pública, doctor Luis Medina Ruiz indicó: “Estamos inaugurando la Semana de la Prematurez en la Maternidad Nuestra Señora de las Mercedes, justamente hablando de la prevención, el cuidado del niño prematuro y fundamentalmente, de la mujer embarazada. Con un buen control del embarazo, la prevención de una infección urinaria, la detección temprana de hipertensión arterial o diabetes gestacional, se logra que ese niño permanezca más tiempo dentro del vientre brindándole mayores posibilidades una vida más sana y con mayor potencial”.
“Tenemos el pedido de nuestro gobernador Osvaldo Jaldo de estar cerca de la comunidad. Y dentro de nuestro Plan Rector, la mujer embarazada y el niño, son pilares fundamentales. Todas nuestras maternidades, fundamentalmente la Central, tiene una neonatología de primera, que genera muchos milagros”, precisó.
Finalmente, el titular de la cartera de Salud aseguró: “Esos niños que nacen con muy pocas posibilidades, con 25 semanas, con 700, 800 gramos, y de pronto se van de alta 3, 4, 5 meses después, con mayor calidad de vida, son milagros que se pueden realizar gracias a que contamos con un equipo de salud potente, la mejor tecnología y, por supuesto, mucha vocación de servicio. Hoy también festejamos junto a las mamás, a los papás, que son parte del equipo”.
El director de la Maternidad, doctor Alberto Agote, participó del emotivo acto dedicado a recalcar el trabajo que realiza la institución en el cuidado de los recién nacidos prematuros, un área en la que el efector se ha consolidado como referente provincial.
“La Maternidad no es solo la atención de la embarazada. También está la otra parte, que es la atención del recién nacido. Nosotros como hospital monovalente que asiste a la mamá y al bebé, contamos con un piso completo destinado a la neonatología”, explicó.
Por decisión de política sanitaria, la mayoría de los bebés que nacen con menos de 1500 gramos son derivados a esta maternidad, ya que es el lugar donde se les puede brindar mayores posibilidades terapéuticas, con menores riesgos y con total garantía de equidad en el acceso a la atención.
Agote aclaró que el compromiso con la prematurez no finaliza cuando el recién nacido recibe el alta. “No termina allí nuestra labor, ya que es cuando continuamos con los programas de prematurez, que incluyen el acompañamiento al domicilio y todo lo que el niño requiera”, resaltó.
El director también destacó la infraestructura tecnológica del hospital, que complementa el trabajo del recurso humano especializado. El efector cuenta de forma operativa con 60 unidades entre cervocunas e incubadoras. Entre lo más avanzadas mencionó, la cirugía fetal, que permite intervenir al bebé dentro del útero; la hipotermia terapéutica, fundamental para el tratamiento de lesiones neurológicas; el óxido nítrico inhalado, utilizado en patologías respiratorias graves; los respiradores de alta frecuencia y de volumen garantizado, equipos de última generación indispensables para los recién nacidos extremadamente prematuros.
“Nada de esto es fácil de conseguir, este equipamiento es posible gracias a una decisión política sostenida de nuestro gobernador Osvaldo Jaldo y el ministro Luis Medina Ruiz, quienes comprenden la importancia de fortalecer esta política de salud en toda la provincia”, enfatizó.
La doctora Claudia Quinteros, médica neonatóloga de la Unidad de Lactancia Materna y de la Residencia de Madres, destacó el valor de la Semana de la Prematurez, una instancia que el equipo de salud prepara durante todo el año con un fuerte enfoque educativo y preventivo.
“No se festejamos la prematurez, utilizamos esta semana para capacitarnos, promover la prevención y mejorar la sobrevida de los niños que nacen tan pequeñitos. Agradecemos el acompañamiento de los padres, la familia y el de esta institución comprometida con la salud perinatal, algo fundamental para que estos bebés puedan desarrollarse con las mejores oportunidades y enfrentar el menor número posible de complicaciones”, destacó.
La neonatóloga subrayó la importancia del trabajo interdisciplinario y el esfuerzo de todo el equipo de salud, lo que implica la preparación continua para brindar una atención de calidad a los recién nacidos prematuros.
Quinteros hizo hincapié en que el mensaje central de esta semana apunta a los cuidados prenatales. “El control prenatal es una de las primeras medidas para prevenir la prematurez, este seguimiento no implica solo asistir a las consultas médicas, sino también adoptar hábitos saludables que disminuyen el riesgo de un parto prematuro”.
Entre los factores que deben tenerse en cuenta mencionó la eliminación de hábitos tóxicos, una adecuada alimentación y la búsqueda activa de información por parte de las embarazadas para cuidar su salud y la del bebé.
Por su parte, la doctora Cecilia Juárez, médica pediatra y neonatóloga, jefa del servicio de Neonatología de la Maternidad, indicó que este es un periodo dedicado a reflexionar sobre el impacto que tiene nacer antes de tiempo en la salud pública.
“Es una semana muy importante, de reflexión sobre lo que significa la prematurez y lo que representa para el sistema sanitario. Nacer antes de tiempo tiene un alto costo y requiere mucha dedicación”, explicó Juárez. Durante estos días, el servicio desplegará diversas actividades científicas centradas en la prevención, el abordaje del parto prematuro y la actualización de prácticas asistenciales.
Uno de los anuncios más relevantes es la presentación de un protocolo para la prevención de la hemorragia intraventricular, una de las complicaciones más graves en los recién nacidos prematuros.
“Aunque la natalidad ha disminuido a nivel global, en el Instituto Maternidad se registran nacimientos prematuros en porcentajes significativos. Hasta octubre, nacieron 108 prematuros extremos, es decir, bebés menores de 28 semanas, lo que representan el 2,6% de los nacidos, pero cada uno implica un enorme trabajo”, detalló.
Juárez señaló que la atención de estos pacientes requiere una internación prolongada ya que cada niño necesita entre dos y tres meses de cuidados intensivos antes de volver a su hogar. El proceso demanda un abordaje interdisciplinario y un equipo amplio y comprometido, que trabaja con dedicación y un trato humanizado para brindar las mejores oportunidades de vida.
“Es mucho trabajo, pero también mucha esperanza”, expresó la jefa de Neonatología, destacando la importancia de continuar fortaleciendo la prevención y la calidad de la atención neonatal.
La mamá de Benicio, un bebé que salió adelante gracias al equipo de Neonatología, contó: “Mi bebé llegó al mundo con 36 semanas de gestación y debió ser asistido inmediatamente por el servicio de Neonatología debido a una pequeña dilatación en el riñón y dificultades para succionar. Estoy muy agradecida al equipo de salud que lo acompañó desde el primer momento ya que estuvo primero en UTI, con una sonda por donde le pasaban la leche, luego gracias a todas las doctoras que lo atendieron tan bien y él pudo succionar”, contó.
Hoy, Benicio tiene un mes y cuatro días, y se encuentra en buen estado, ya en su casa con su familia. Su mamá recordó que esta no era su primera experiencia con neonatología, pero sí la más dura. “Fue bastante difícil para mí, verlo con lámparas, mangueritas, la sonda, era algo nuevo, además él era muy chiquitito. A pesar de esta situación siempre me sentí acompañada, las manos de las enfermeras me ayudaron mucho con la lactancia para que él pudiera succionar y me contuvieron mucho en ese momento”, recordó.
Finalmente expresó: “Estoy muy agradecida por la atención que nos brinda. Tenía muchas ganas de volver a mi casa con él y por momentos me sentía vacía, pero gracias a ellos hoy puedo tenerlo conmigo. Lo atendieron muy bien, todos, enfermeras, médicos y el equipo completo de neonatología”, cerró.



