
Salud aborda la patología con una mirada integral para su detección y abordaje médico.
Cada 5 de mayo se conmemora el Día Mundial de la Hipertensión Pulmonar, una enfermedad poco frecuente, progresiva y muchas veces subdiagnosticada. En este contexto, el Ministerio de Salud Pública, a cargo del doctor Luis Medina Ruiz, promueve acciones de concientización y abordaje integral. Desde el Hospital Padilla, la doctora Victoria Fernández Gómez explicó sus causas, síntomas y tratamientos.
En la oportunidad, la doctora Fernández Gómez neumonóloga y encargada del consultorio de hipertensión pulmonar del hospital Padilla, explicó que el Día Mundial de la Hipertensión Pulmonar se conmemora cada 5 de mayo desde el año 2012, tras una decisión de múltiples asociaciones de pacientes. La fecha recuerda la primera muerte documentada de un niño con esta enfermedad en España, a causa de una intoxicación con aceite de colza.
Siguiendo esta línea, brindó una definición médica clara y concisa sobre esta patología: “Esta patología está encuadrada dentro de las enfermedades raras. La sufre el 1 % de la población mundial, pero en mayores de 65 años puede ser el 10 %. Es una enfermedad en la cual se van estrechando progresivamente los vasos pulmonares y esto ocasiona aumento de presión en la circulación pulmonar. Esto da como consecuencia que, si esta patología no se diagnostica y no se trata a tiempo, puede llevar a una insuficiencia cardíaca derecha, y si se sigue progresando, a la muerte de la persona”.
A continuación, la doctora detalló que la hipertensión pulmonar puede tener múltiples causas, entre ellas enfermedades cardíacas, respiratorias como el EPOC o la fibrosis pulmonar, y también patologías menos frecuentes como las enfermedades reumatológicas lupus, esclerodermia o artritis reumatoidea. Indicó además que la enfermedad hepática crónica con cirrosis, el HIV, las cardiopatías congénitas y las trombosis crónicas en las arterias pulmonares conocidas como hipertensión tromboembólica crónica también pueden desencadenarla. Finalmente, aclaró que existe un grupo de casos en los que no se identifica una causa específica, denominándose hipertensión pulmonar idiopática.
Seguidamente, describió los síntomas que pueden alertar sobre su presencia: “Sobre todo, falta de aire, que es disnea desde el punto de vista médico, sobre todo al hacer algún tipo de esfuerzo. Puede causar fatiga, puede ocasionar síncope, es decir, pérdida de conocimiento. Puede también causar signos asociados a la insuficiencia del ventrículo derecho, como edema, que es la hinchazón en miembros inferiores. También pueden tener los pacientes cianosis, que se manifiesta con una coloración azulada a nivel de las extremidades o a nivel labial”.
Respecto a cómo se realiza el diagnóstico, indicó los pasos iniciales del abordaje clínico: “Si se la sospecha, se deben realizar en primera instancia estudios de función respiratoria y cardiovasculares, y descartadas esas dos causas, que son las más frecuentes, empezar a realizar una serie de exámenes para descartar otras posibles causas”.
Finalmente, la doctora Fernández Gómez indicó que existen tratamientos específicos con fármacos para ciertos tipos de hipertensión pulmonar, mientras que en otros casos el abordaje debe centrarse en tratar la enfermedad de base que origina la patología.
Todas estas acciones se desarrollan en los efectores del sistema de salud público de Tucumán, siguiendo los lineamientos del ministro de Salud Pública, doctor Luis Medina Ruiz, quien impulsa el abordaje integral, la prevención, el diagnóstico temprano y el acompañamiento terapéutico para pacientes con enfermedades poco frecuentes.