
Fue en el marco del 38° Encuentro Nacional de Mujeres Justicialistas, desarrollado este viernes en la provincia.
En el marco del 38° Encuentro Nacional de Mujeres Justicialistas, desarrollado este viernes en la provincia, el ministro de Salud, Luis Medina Ruiz, recibió una distinción especial en nombre de todo el sistema sanitario, en un acto cargado de emotividad y compromiso social.
Durante la ceremonia, el funcionario fue galardonado con la estatuilla de Eva Perón, símbolo de lucha, justicia social y entrega hacia los más vulnerables. Al respecto, Medina Ruiz expresó: “Este reconocimiento lo hago extensivo a todo el personal de salud y al gabinete del gobernador Osvaldo Jaldo, que nos honra con haber confiado en nosotros para esta tarea tan noble y difícil que es estar cerca de la comunidad y dar respuestas desde el sistema de salud”.
El titular de la cartera sanitaria agradeció especialmente a María de los Ángeles ‘Chochi’ Artaza, referente del movimiento de mujeres justicialistas, y valoró las muestras de afecto recibidas durante el encuentro. “Evita representa a quien luchó por los pobres, por los necesitados, y dejó un legado que aún hoy sigue vigente. En Tucumán hay esperanza, hay mucha gente que piensa en el prójimo. Y nosotros, que trabajamos en salud, sabemos que una persona vulnerable socialmente y enferma enfrenta una situación crítica. Por eso, tener en la provincia la posibilidad de dar respuestas desde nuestros hospitales y centros de salud es un logro que debemos agradecer al gobernador”, subrayó.
Durante el evento también fue distinguida la fiscal de Estado, Gilda Pedicone de Valls, quien recibió un diploma honorífico en el marco del homenaje a Eva Perón. En sus palabras, destacó la importancia del legado político de Evita: “Nos dejó el voto femenino, una conquista que muchas veces se da por sentada, pero que no es tan antigua. Fue una idea que logró concretar en vida y, simbólicamente, la ejerció por primera vez desde su cama de enferma, con una urna a su lado. Esa imagen sigue siendo de una enorme fuerza para todas las mujeres”.
Pedicone de Valls hizo hincapié en los desafíos que aún persisten en términos de representación política femenina: “En Tucumán todavía se mantiene un 30% de cupo para las mujeres. El ideal es la paridad: mitad varones, mitad mujeres. Esta es una deuda pendiente que, seguramente, será contemplada en la propuesta de reforma electoral impulsada por el gobernador. Ya no hay excusas para postergarlo”.
Finalmente, resaltó la paradoja de que, siendo mayoría entre el electorado, las mujeres aún enfrenten obstáculos para acceder en igual proporción a los cargos de representación: “Hay que achicar la brecha entre ser votante y ser elegible. La ampliación del cupo femenino es indispensable”.